La renovación del lenguaje corre paralela a la evolución de los medios de comunicación, que, voluntariamente o no, se ocupan de difundir los distintos usos y modos de la lengua. Con el surgimiento y la masificación de Internet, uno de los desafíos que afronta el idioma español es el de alcanzar una expresión lo suficientemente neutra como para resultar comprensible a los hispanoparlantes de todo el mundo. Es decir, la ubicuidad de la red alienta el desarrollo de un español global, igual de accesible para un sevillano, un neoyorquino o un montevideano.
La Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA), una institución sin fines de lucro dedicada a impulsar el buen uso del idioma español en los medios de comunicación, tuvo seguramente en consideración estos movimientos de deslocalización de la lengua a la hora de plantearse su manual de estilo para los nuevos medios. El resultado, que se publica en línea bajo licencia Creative Commons, bien merece la atención de los traductores que trabajan con la lengua española, ya que, además de brindar una serie de consejos sobre estilo, ortografía y etiqueta en los nuevos medios, presenta artículos de gran interés, incluye un buscador de dudas lingüísticas y ofrece la posibilidad de contribuir mediante entradas propias.
Resulta curioso cómo esta tendencia globalizante del español se da de manera simultánea a la necesidad de un nivel de localización cada vez más preciso en el mercado mundial de la traducción. Esta tensión obedece a la complejidad creciente de la actividad, que en su afán por responder a estos nuevos desafíos abarca cada vez más y mejores prácticas.
A través de su sitio web y con la colaboración de los equipos de ventas, los de gestión de proyectos y los lingüísticos y de edición, Trusted Translations, líder en traducciones en español, ayuda a sus clientes a evaluar qué nivel de localización desean para sus traducciones.