La vez pasada hablamos del dilema de cómo enviar a traducir un sitio web. Uno de los elementos clave que compone un sitio web son sus imágenes. Botoneras de navegación, banners, gráficos de publicidad, títulos en formato GIF, y cualquier otro tipo de gráfico que sea no editable.
Para traducir las imágenes de una página web, en Trusted Translations generamos grupos de trabajo, que, además de incluir a un traductor, un editor y un corrector de texto, tiene el agregado de un programador de HTML y un diseñador gráfico, utilizamos las herramientas gráficas de última generación para obtener los mejores resultados posibles.
Traducir el texto de una imagen, dependiendo de la expansión de texto, puede representar un gran desafío para el diseñador gráfico. Se estima, por ejemplo, que la expansión de texto al traducir del inglés al español es de entre un 15 y un 20%. Por ende, una palabra de 5 letras que ocupa 2,5 cm de largo en inglés, puede tener su equivalente en una palabra de más de 10 letras o, incluso, más de 1 palabra en español. En algunos casos, es necesario además adaptar el ancho y/o alto de los archivos GIF, previa aprobación del cliente. Por ejemplo, es posible que el tamaño de los botones de una barra de navegación horizontal deba ser modificado en su totalidad, para que no quede sobrecargada de texto y para que la palabra traducida encaje perfectamente, y que conserve a la vez el ancho total de la barra de navegación (la suma de todos los anchos de los botones).
Por eso el trabajo en equipo entre traductores y diseñadores, y la fluida comunicación entre ellos es fundamental para el éxito de la traducción de lo que finalmente será una página web completamente localizada. Y eso no es todo: la traducción de los títulos y de los encabezamientos de las imágenes debe ser idéntica a la que se utilice en el cuerpo principal de la página web. El simple hecho de coordinar todas estas tareas puede terminar en caos si no se tienen las herramientas de trabajo adecuadas.