Hace poco escribí una breve reseña sobre qué era el ebonics o inglés afroamericano, que si lo recordamos se trataba de una variante del inglés utilizado por la población afroamericana estadounidense, por lo general, de estratos sociales poco favorecidos pero también utilizada como «lengua de la calle» (es decir, no limitado su uso a personas de raza negra).
Y me ha resultado bastante curioso toparme con una noticia de hace unos meses de un conocido medio informativo donde rezaba el siguiente titular:
“DEA wants to hire Ebonics translators” (la Agencia Antidrogas de Estados Unidos busca traductores de ebonics).
Parece ser que esta variante del inglés, que durante mucho tiempo fue objeto de burlas y de controversia, es tomada muy en serio hoy por la DEA. Según indicó a la prensa uno de sus agentes, necesitan nueve traductores para que los ayuden con las escuchas telefónicas de distintas investigaciones y, de ser necesario, que puedan testificar ante un tribunal.
Esta lengua, a la que en ocasiones se hace alusión (erróneamente) como bad English y cuya procedencia también sigue siendo motivo de debate, está en el punto de mira por ser muy utilizada como medio de comunicación en el sector del narcotráfico y que, al parecer, no sólo es utilizada por los afroamericanos sino también por los latinos y caribeños.
Como podéis consultar en el anterior artículo sobre el ebonics, las diferencias son terminológicas, gramaticales y fonéticas, por lo que una persona que hable el inglés normativo estándar lo va a tener complicado para entender qué están hablando dos personas que se comunican en esta lengua; por no mencionar lo que se dificulta cuando no se sabe determinar si las vocablos que utilizan pertenecen realmente al ebonics o se trata de palabras clave entre, por ejemplo, traficantes para darse información…Aunque eso ya es otro tema..
Lo que puedo decir es que me alegro de que al menos se recurra a profesionales de la lengua que, sin duda, les serán de gran ayuda a la DEA.
Una vez más queda claro el importante papel que juega el sector de la traducción e interpretación en la vida diaria.