La cotización de un proyecto es tan importante como el proceso de realización del mismo. Cotizar al menor costo, por ejemplo, atraerá al cliente y tendremos mayores posibilidades de venta.
Como Project Manager creo que la mejor forma de abaratar costos en los proyectos es utilizando herramientas de traducción. ¿Por qué? Utilizando estás herramientas podríamos ahorrarle al cliente el costo de los segmentos repetidos; y, en el caso de que existiera una memoria previa, ahorrarles el costo de los “full matches”- segmentos que están en la memoria ya traducidos y también están presentes en el nuevo texto a cotizar. Por lo tanto el análisis de los archivos es fundamental en esta etapa ya que solo aquellos archivos de texto editable pueden ser procesados por las herramientas de traducción.
¿Qué hacer con aquellos archivos cuyo texto no es editable? En general, los archivos más difíciles de analizar, por ejemplo, son aquellos escaneados o imágenes por las cuales no es fácil recuperar su contenido. Por lo tanto debemos buscar la mejor manera de transformarlos a texto editable. Para dicha tarea existen aplicaciones OCR (optical character recognition) que convierten el texto de las imágenes en texto editable y así podemos trabajarlos con herramientas de traducción abaratando los costos. Es importante que siempre contemos con varias de estas herramientas y vayamos probando cuál convierte mejor de acuerdo a cada tipo de archivo.
El tiempo de entrega es otro factor que juega un papel principal a la hora de cotizar un proyecto. El cliente en general necesita la traducción lo antes posible. Entonces, es fundamental que el proceso de traducción sea lo más veloz posible sin afectar la calidad. Por eso es que en este paso debemos proyectar cómo vamos a llevar a cabo las diferentes tareas, cuántos traductores van a estar involucrados, cuántos editores, si necesita pasar por el sector de diseño y durante cuánto tiempo.
Un buen Project Manager, tiene que tener la capacidad de acomodar todas las piezas de este proceso de la mejor manera posible para que el proyecto sea lo más económico posible para el cliente pero aún así redituable para el proveedor.