La respuesta depende del siglo que consideremos, básicamente.
En efecto, a través de la serie de artículos que comenzó con La Función Social de la Traducción en el Pasado, hemos analizado brevemente la evolución de la profesión del intérprete/traductor y hemos notado grandes cambios en lo que podríamos denominar el “perfil del traductor”.
Sintetizamos los hechos más destacados de estos 4000 años de evolución (2000 años antes de Cristo y 2000 años después de Cristo):
Siglo XX a.C.: la civilización hitita tenía por costumbre traducir todo mensaje a los idiomas de los pueblos conquistados.
Siglo XII a.C.: en China la actividad de traducción estaba a cargo de funcionarios del gobierno que deseaban transmitir su ideología.
Siglo III a.C.: los intérpretes colaboraron en el conflicto entre sumerios y semitas.
Siglo II a.C.: en China la traducción fue un instrumento para difundir los conocimientos del extranjero.
Siglo I a.C.: los intérpretes adquirieron una mayor relevancia por el intenso intercambio comercial entre Oriente y Occidente.
Comienzos de la era cristiana: en China el budismo favoreció el inicio de una escuela de traducción. De manera similar, en el catolicismo, Jerónimo de Estridón tradujo la Biblia en el año 405 para divulgar el mensaje de salvación.
Siglo XIII: llegaron a China los árabes y con este intercambio cultural, se tradujeron obras científicas del árabe al chino.
Siglo XV: el almirante chino Zheng He fundó una escuela de intérpretes en Nankín y 16 de los mejores graduados formaron parte de la poderosa flota de exploración china.
Siglo XVI: la Corona Española utilizó intérpretes indígenas y españoles para la conquista del Nuevo Mundo. En el Viejo Continente, la traducción literal de textos religiosos era uno de los pocos trabajos socialmente aceptados para una mujer noble.
Siglo XVII: surgieron en Europa las traducciones “bellas infieles”, que no eran tan literales como sus predecesoras, y estaban a cargo, principalmente, de personas cultas de la nobleza.
Siglo XIX: la traducción era llevada a cabo por personas que se dedicaban a la traducción y no ya por aficionados a la cultura o el arte. Estos trabajadores de la traducción recibían los honorarios correspondientes.
Siglo XX: el traductor es un profesional universitario. En lo que atañe al idioma español, la carrera universitaria surgió alrededor de 1970 cuando España fundó varias escuelas universitarias de traducción e interpretación. En la década de los noventa, estas escuelas universitarias se integraron a las facultades de Filosofía y Letras o se convirtieron en facultades independientes. Un proceso similar se dio en casi toda Latinoamérica. En este siglo, también surgió Internet y de su mano, el nuevo mercado de trabajo para los traductores: las agencias de traducción, que forman equipos de traducción con profesionales de distintas áreas (traducción, diseño gráfico, sistemas informáticos).
Y la historia continúa…
La lista completa de artículos publicados sobre la historia del “perfil de traductor” es la siguiente:
La Función Social de la Traducción en el Pasado
Los primeros “traductores” fueron los intérpretes
Los intérpretes y la interpretación en China
Las traducciones y la historia china
Ser fiel o no ser fiel: esa es la cuestión
Comienzo de la traducción profesional: George Eliot