Quienes tienen dislexia padecen un trastorno del aprendizaje que parece derivar de una alteración del neurodesarrollo, ya que se presenta en niños que no tienen ningún problema físico, psíquico ni sociocultural.1 Los disléxicos tienen dificultades para leer como consecuencia de un impedimento cerebral que se relaciona con la visualización de las palabras. Los disléxicos suelen invertir las palabras de manera total o parcial, invertir las letras, escribir una misma palabra de diferentes maneras y tener dificultades para distinguir la izquierda de la derecha, entre otros síntomas.
La dislexia no está relacionada con el nivel de inteligencia, pero afecta el aprendizaje. Una persona disléxica puede ser tan inteligente como cualquiera de sus pares. El problema es que, en la mayoría de los sistemas educativos, se aprende a través del código escrito, lo que impide que el alumno asimile los contenidos no solo de las materias que se relacionan con el lenguaje, sino de todas las áreas. Al buscar aprender, el niño disléxico pone tanto esfuerzo en la tarea de lectoescritura que termina cansándose y perdiendo la concentración. A menudo, los padres y los maestros interpretan esto como falta de interés y presionan al niño para que haga un mayor esfuerzo, pero no saben que, en realidad, lo están perjudicando.
Sin embargo, ser disléxico no significa que una persona no pueda salir adelante. En la larga lista de disléxicos exitosos podemos encontrar a personas como la actriz Whoopi Goldberg; el director y productor Steven Spielberg; el teniente gobernador de California, Gavin Newsom; o el diseñador de moda Tommy Hilfiger. Pero lo que más nos importa a nosotros es que, entre las personas disléxicas exitosas, también podemos encontrar a una lingüista: la licenciada en lingüística y doctora en ciencias de la computación Luz Rello.
A pesar de haber tenido muchas dificultades durante su infancia como estudiante, o mejor dicho, gracias a eso y a sus dos títulos, esta lingüista española ha desarrollado Dyseggxia, una aplicación para teléfonos móviles que ayuda a los niños con dislexia a superar sus problemas de lectura y escritura en castellano a través de juegos. Además, les permite a los padres aprender cuáles son los errores típicos de sus hijos. Por crear esta aplicación, le han otorgado el premio a mejor investigador joven de Europa en 2016.
Cuesta imaginarse que una persona con este trastorno se haya dedicado al estudio de la lengua, ¿verdad? Parece imposible, pero la licenciada Rello nos demostró que no lo es. ¿Hay algún traductor con dislexia? ¡Vamos! Ahora que lo saben, ¡no sean tímidos y levanten la mano!
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1 https://www.disfam.org/dislexia/
