Como ya hemos visto, en el área de la traducción muchas veces se producen los llamados anglicismos, que consisten en replicaciones demasiado literales trasladadas desde el inglés a, en este caso, el español. A veces es claro que hemos “pedido prestadas” estas palabras o frases al inglés, pero en otros casos no nos damos cuenta. Los siguientes ejemplos tienen que ver con palabras o frases muy recurrentes que suelen alterar la forma de expresar la idea en la lengua meta.
En primer lugar, los verbos suelen presentar inconvenientes si el traductor se esfuerza por traducirlos sí o sí, en especial si se trata de los conocidos verbos modales. Para el caso de may o de might, se suele recurrir al verbo “poder” o a la perífrasis “es posible”. Aunque el significado no es desacertado, ningún hablante nativo del español usaría tanto estas estructuras. Además, no siempre estos verbos modales equivalen a un “tal vez”. Este es un claro ejemplo: “I hope he may succeed” se traduce por “Espero que tenga éxito”. El subjuntivo basta para representar la idea. Dentro del uso de los verbos modales en ocasiones puede incluirse también “help”. En sus diversas combinaciones con otros verbos, la mayoría de las veces es mejor suprimirlo al pasar al español. “Help promote” es simplemente “promover” y no “ayudar a promover”. ¡No compliquemos más las cosas! Otros verbos que pueden tener más de una traducción son: “include” (que no siempre es “incluir” y puede significar “contener”, entre otros) o “achieve” (que no siempre es “lograr”, sino que puede ser “constituir” o “adquirir”).
Algo importante para recordar: ¡usemos sinónimos! Es muy aburrido toparse con las mismas palabras y frases una y otra vez. Estos dos casos suelen darse en textos relacionados con temas económicos: “Effort” puede traducirse por “esfuerzo”, pero también por “labor”, “afán”, “empeño”, etc. En inglés se usa muchísimo, por lo que es bueno buscar otras formas de traducir esta palabra. “By far” es otra frase que suele dejarnos pensando un rato antes de decidirnos por un equivalente. “Con mucho” no es la mejor opción. Consideremos la posibilidad de usar “con ventaja”, “obviamente”, “indisputablemente”, “con creces” o “con mucha diferencia”. ¡Son varias las opciones disponibles!
Por último, en materia de seguros suele utilizarse el adjetivo “eligible”, que ha sido adoptado en español como “elegible”. Por lo general, salvo que el texto esté dirigido a los hispanohablantes que viven en los Estados Unidos (es decir, el español de Estados Unidos), es mejor optar por “a considerarse”, “calificado para”, “con derecho a”, “admisible”, etc. Siempre es muy importante analizar el objeto o la finalidad del proceso para optar por la mejor alternativa.