Como explicamos en otras ocasiones, Memsource es una herramienta de traducción asistida por computadora (CAT tool) que nos permite trabajar con el texto a dos columnas: una para el texto fuente y otra para el texto meta. También nos da la posibilidad de crear bases terminológicas y memorias de traducción y nos ofrece herramientas de búsqueda y de control de calidad.
Cuando recién empezamos a trabajar con Memsource, la posición de algunos espacios suele generar dudas. Colocarlos en el lugar incorrecto hará que, aunque nuestro trabajo sea muy bueno desde el punto de vista lingüístico, quede arruinado por errores de formato. En esta entrada, vamos a ver algunas cuestiones relacionadas con este tema que nos ayudarán a que nuestro producto final sea perfecto desde todo punto de vista.
Por empezar, es importante saber que Memsource inserta espacios entre segmentos automáticamente; por lo tanto, no debemos agregar espacios ni al final ni al principio de estos. Si lo hacemos, al ejecutar la herramienta de QA, obtendremos un error de “Espacios iniciales/finales” que nos advertirá el error. Sin embargo, hay veces en las que el texto fuente incluye un espacio al final o al principio del segmento, en estos casos excepcionales, casi siempre conviene agregarlos, ya que lo más probable es que el espacio automático entre segmentos no exista.
Otro espacio incorrecto es el que se agrega antes o después de la etiqueta de unión, que aparece cuando unimos dos segmentos. Como dijimos, Memsource inserta automáticamente espacios entre los segmentos, y la etiqueta de unión incluye ese espacio. También debemos evitar eliminar esta etiqueta, ya que, dependiendo del formato del archivo final, es posible que ocurran errores al descargarlo si la etiqueta de unión no está presente.
Finalmente, debemos estar atentos a los espacios que rodean al resto de las etiquetas. En general, la mayoría (sobre todo las que vienen de a pares, una de apertura y otra de cierre) va seguida o precedida por un espacio. Cuando hay muchas en un mismo segmento, solemos concentrarnos en colocarlas en el lugar correcto y olvidamos copiar los espacios del original. Si esto sucede, cuando exportemos el texto a su formato final, las palabras quedarán pegadas, por ejemplo, tendremos frases como “haga clicaquí”.
Para ser más prolijos, cuando tengamos dudas, lo mejor es obtener una “Vista previa de la traducción” para ver el texto en su formato final y activar la opción de “Desplegar caracteres ocultos” para asegurarnos de que los espacios estén en el lugar correcto. En nuestra entrada “Cuatro funciones de Memsource para mejorar la calidad”, encontrarán más información sobre estas herramientas.
Si bien pueden parecer detalles pequeños e insignificantes, ubicar los espacios en los lugares correctos es importante para obtener un mejor producto final. Más allá de lo lingüístico, el formato también contribuye a la calidad que todos los traductores profesionales buscamos para nuestros trabajos.