Es muy frecuente ver que antes de comprar un producto o servicio, los compradores recorren las distintas opciones que ofrece el mercado a fin de determinar cuál es la más conveniente en cuanto a calidad y precio. Pero una vez que eligen una opción, a veces, no eligen siempre al mismo proveedor y, por distintas razones, pasan de un proveedor a otro.
El objetivo de este artículo es demostrar por qué este ir y venir de un proveedor a otro no es conveniente por tiempos y por calidad.
Asumimos que el cambio de un proveedor a otro resulta conveniente económicamente.
1. Proyectos urgentes o “rush”
Cuando un cliente es recurrente, tiene más posibilidades de obtener una traducción de excelente calidad para un proyecto con plazos de entrega urgente, ya sea que se trate de proyectos muy cortos como de proyectos muy largos.
2. Consistencia terminológica
El mercado actual de traducción hace indispensable el uso de programas informáticos de traducción, que contienen la tarea de los traductores que han trabajado con los proyectos de un cliente. Por ende, en los nuevos proyectos de un cliente, se utilizará la misma memoria de traducción para uniformar todo el material de traducción que se entrega a un cliente.
3. Ahorro en el precio final a pagar
Justamente, debido al hecho de que un cliente recurrente tiene una memoria de traducción propia, con el contenido de todas las traducciones ya entregadas, los nuevos proyectos analizados con esa memoria de traducción mostrarán las repeticiones, que no deberá pagar.
La ecuación repeticiones = gratis influye notablemente sobre los costos.
En cambio, el hecho de ir y venir de un proveedor a otro, incluso arriesgándose a bajar la calidad de las traducciones entregadas a un mayor costo, no presenta estos beneficios.
Versión en inglés: The Advantages of Being a Recurrent Client