Uno de los desafíos más grandes en el momento de traducir es enfrentarse a la falta de contexto. Si entender el texto es indispensable para lograr una traducción de calidad, contar con el contexto y las referencias es igualmente importante.
Supongamos que un cliente necesita la siguiente frase aislada en inglés traducida en otro idioma: “Crankshaft Line Gantries consist of overhead equipment, such as a Gantry Carriage, Drip Pan, Blow Offs, and Shot Pins”. Esta oración, a pesar de ser tan corta, puede representar un dolor de cabeza para el traductor, ya que no tiene ningún tipo de contexto. Tendrá que buscar qué es cada uno de los elementos, a qué pertenecen, qué función cumplen, etc. En este caso, la oración en cuestión es parte de un manual de usuario de una cinta transportadora, por lo que la traducción es: «Los Gantries de la Línea del Cigüeñal están compuestos por un equipo superior, por ejemplo, el Carro del Gantry, la Bandeja de Goteo, las Estaciones de Soplado y los Pestillos de Resorte.» (Una oración con terminología bastante técnica y rebuscada)
Otro ejemplo es cuando el cliente desea traducir su página de Internet y envía los archivos en formato HTML para traducir. Si el cliente no nos dice a qué página pertenecen los archivos (o nosotros no se lo pedimos) el traductor tendrá que traducir a ciegas, adivinando cómo traducir las palabras sueltas. Si bien es un ejemplo exagerado, puede suceder que, al no tener la página en cuestión, el traductor traduzca «Home» como «Hogar», cuando en realidad se refiere a la página de inicio (lo que puede tener graves consecuencias para el usuario). Teniendo la página de referencia, la tarea de traducción será mucho más rápida y exacta.
Por esta razón, debemos asegurarnos de contar con toda la información necesaria para lograr una traducción precisa. La comunicación con el cliente es una parte fundamental dentro de un proyecto de traducción, ya que en este paso podemos solicitar información y material de referencia.
Muchas veces, a quienes manejamos proyectos de traducción nos toca encontrar el contexto o referencias del texto para traducir. Puede suceder que en una novela aparezca una referencia a otra obra (un pasaje de la biblia, una película, otra novela) que, de no entender la referencia, el traductor no la traduzca correctamente. Incluso debemos tomar decisiones sobre el tono de la traducción, si usar verbos en infinitivo o dirigirse al usuario, etc.
Conocer el contexto siempre resultará en una traducción de mejor calidad. No solo es responsabilidad del cliente enviar toda la información sobre el texto en cuestión, sino también de la persona a cargo del proyecto de traducción. En Trusted Translations, siempre nos esforzamos en mantener una comunicación fluida con nuestros clientes para poder brindar el mejor servicio lingüístico del mercado.