El director del Instituto Cervantes, Víctor García de la Concha, anunció la semana pasada que la organización se encuentra en proceso de intensificar la colaboración con distintos institutos culturales iberoamericanos. Esta iniciativa ya había sido anunciada en comunicaciones anteriores de la institución, pero es ahora cuando comienzan a verse los frutos de esta colaboración. Se trata, además, de fortalecer la estrategia de inmersión en el medio estadounidense, que es el gran objetivo a medio plazo del Instituto.
De la Concha anunció la firma de un convenio con el gobierno de México para la cesión recíproca de centros culturales. México, el país donde se concentra el mayor número de hispanoparlantes, cuenta con 14 centros culturales en los Estados Unidos, por lo que el Cervantes no podría «pretender ir (a los Estados Unidos) si no es del brazo de los latinoamericanos y, sobre todo, de México, según manifestó de la Concha en declaraciones recogidas por el diario madrileño El País. No está previsto que los distintos institutos del español vayan a unificar sus presupuestos ni su gestión, al menos a corto plazo.
El Instituto tiene la dificil misión de expandirse en un momento de contracción económica generalizada. Su presupuesto, de hecho, se redujo en más de un 3% el último año, pero su intención es mantener abiertos todos los centros que actualmente se encuentran en funcionamiento. Estos garantizan su presencia en 86 ciudades de 43 países y lo convierten en la institución más grande de la lengua española. Para ello, el Cervantes está dispuesto a resignar ciertas comodidades edilicias en favor de locaciones más modestas pero que permitan mantener sus actividades esenciales. En este sentido, García de la Concha destacó que “Lo importante son las personas, no las piedras”, es decir, que resulta más importante conservar a toda la plantilla por encima de los bienes inmuebles.