Esto es algo extremadamente importante. Con esto me refiero no sólo a la educación como traductor en sí que deben recibir las personas dedicadas a esta carrera, sino también con respecto a su cultura en general, y más importante aún, cuando se tiene una especialización en alguno o varios temas.
La educación del traductor consiste en su capacidad de dominar su idioma materno: redacción, ortografía, reglas de escritura, reglas de traducción, etc. Por supuesto, esto aplica de igual forma al idioma del que se traduce.
La especialización en un tema determinado puede ser por convicción propia del traductor, es decir, algún tipo de fascinación con el tema lo cual le lleve a estudiarlo a fondo, o bien, porque tiene además otra profesión o carrera que lo acredita como especialista en el tema.
Los principales temas en los que se especializan los traductores son:
• Técnico
• Médico
• Legal
• Software
En español es un poco más complicado, ya que este tiene grandes variaciones tanto en el uso de las palabras como en su aplicación, los modismos y su significado según el país, etc.
Esto también exige cierto tipo de especialización, al menos por áreas o regiones, que abarquen ciertos países que tengan similitudes.
Además de ofrecer servicios especializados, las agencias de traducción competitivas hoy en día necesitan contar con traductores especializados en estos temas, ya sea por convicción propia o por la necesidad que presentan los retos diarios, así como poder ofrecer a sus clientes una gran variedad de pares de idiomas para traducir.