Si bien las predicciones varían, dependiendo de la ubicación geográfica y el campo donde uno busque desarrollarse, he aquí algunas formas de abordar esta cuestión.
Si el objetivo es prosperar económicamente en mercados de crecimiento, los países agrupados en la sigla BRIC (Brasil, Rusia, India y China) son percibidos como las economías emergentes más grandes del mundo y por ende los idiomas allí hablados se disputarán la importancia global.
Un estudio reciente halló que el español y el árabe son los idiomas con más altas probabilidades de dominar el espectro de lenguas habladas en el futuro.
No obstante, al tomar en cuenta las tendencias demográficas de cara al 2050 según lo establecido por Naciones Unidas, los resultados son muy distintos.
El hindi, el bengalí, el urdu y el indonesio dominarán gran parte del mundo de los negocios para 2050, seguidos por el español, el portugués, el árabe y el ruso, eludiendo toda mención del inglés. Entonces, si quiere sacarle el mayor provecho posible a su curso de idiomas, estudiar uno de los idiomas arriba mencionados probablemente sea la mejor opción.
Por supuesto, los cambios demográficos son difíciles de predecir. Es más, en el estudio solo se incluyeron los mercados de crecimiento actuales, lo que dice poco sobre el potencial de crecimiento de otras naciones que son bastante pequeñas hoy. Además, el árabe y el chino, por ejemplo, tienen muchos dialectos y variedades locales, que podrían dificultar su aprendizaje por parte de quienes quieran estudiarlos como segundas lenguas.
A pesar de todo, el estudio ofrece un amplio panorama de la dirección lingüística que el mundo de los negocios está adoptando: más lejos de Europa y Norteamérica y más cerca de Asia y Oriente Medio.