El argot secreto de California: el boontling

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Hace más o menos 150 años que el cazador Walter Anderson se perdió mientras rastreaba un ciervo herido a través de la selva del Noroeste Pacífico. Descubrió (y dio nombre a) un valle con vegetación abundante que pronto sería la cuna de una pequeña comunidad que desarrollaría su propia manera de hablar.

El boontling (probablemente de «Boonville», una ciudad cercana) es el habla localizada de las personas que trabajan los campos de lúpulo y los viñedos que rodean este lugar. Al contrario de las lenguas que unen pueblos y fomentan el comercio, como el hausa o el papiamento, el boontling sirve para proteger su comunidad de hablantes. Se nutre de fuentes que solo los oriundos de la zona podrían conocer y entender, como anécdotas personales.

Sin embargo, el léxico incluye préstamos del inglés, del gaélico y del español, lenguas bastante comunes en California, y de las lenguas pomo, que pertenecen a los pueblos originarios de la zona. Esa es la parte fácil. La parte difícil son los aproximadamente 1600 vocablos que hacen referencia a eventos locales.

Estudios académicos

En 1971, un profesor de lengua inglesa de la Chico State University, Charles C. Adams publicó un trabajo titulado Boontling: An American Lingo [Boontling: un argot americano]. El profesor fue reconocido como autoridad en este dialecto y tuvo que ganarse la confianza de la gente de Boonville antes de llevar a cabo un estudio histórico y lingüístico exhaustivo de sus características. Su diccionario bilingüe inglés-boontling tiene algunas entradas destacables. Estas son algunas de ellas.

  • barney: v. Abrazar; besar; besuquearse; de la anécdota de un afectuoso residente de Boontville llamado Barney que se dirigía a las mujeres que conocía con nombres como «tesoro» y, a menudo, las besaba al saludarlas y al despedirse.
  • brightlightersust. Un turista, citadino.
  • burlap: v. Realizar el acto sexual. Se dice que una pareja de jóvenes fue sorprendida mientras realizaba el acto sexual sobre unas bolsas de arpillera (burlap, en inglés) en un depósito. La persona que los descubrió salió corriendo y exclamó: “They’re burlapin’ in there».
  • doolsey: sust. Caramelos, dulces, azúcar. Del español dulce, quizá a través de una lengua pomo.
  • heefus: sust. y adj. Una persona irresponsable e incompetente. Deformación de half-ass o half-assed, en el caso del adjetivo.
  • kiloppety: v. onomat. Viajar en vehículo tirado por caballos o andar a caballo. Imita el sonido de las herraduras sobre un camino.

Aunque el boontling se encuentre al borde de la extinción, ya que los pocos hablantes que quedan son de edades avanzadas, aún puede competir por varios títulos lingüísticos. Estos son algunos de ellos.

Lenguas más nuevas

Los orígenes de Boontling se remontan a finales del siglo XIX, más o menos la época del desarrollo del esperanto. Sin embargo, aunque su intención fuera facilitar las comunicaciones internacionales, el esperanto se usa más que nada en el sur de América, en Asia y en Europa y cuenta con entre 30 000 y 180 000 hablantes. Como es una lengua construida, ninguna persona lo ha aprendido como lengua madre.

El menor número de hablantes

Según el Atlas mundial de las lenguas publicado por UNESCO, hay más de sesenta lenguas en peligro crítico de extinción que tienen solo un par de hablantes. Y el número de hablantes cae cuando los más ancianos mueren sin antes transmitir la lengua a sus hijos. Esto ocurrió con la lengua yámana en 2022, cuando el último miembro de esa comunidad murió a los 92 años.

Con más o menos 12 hablantes en el valle Anderson, el boontling también se encuentra en un estado delicado.

Sin embargo, el norte de California es un lugar que atrae a mucha gente por su higgle [comida], y por el frattey [vino]. También se está convirtiendo en un atractivo importante para los amantes de la historia y sus apple-heads [novias] o kimmeys [amigos], especialmente cuando les gusta el bahl hornin’ [buen beber] y los paisajes pintorescos de la cuna de este argot tan particular.

¿Qué les depara el futuro a las lenguas minoritarias?

El futuro de las lenguas es incierto y complejo: depende de incontables factores. Entre ellos, los siguientes.

  • Progreso tecnológico — La comunicación digital y la traducción automática pueden ayudar a preservar las lenguas minoritarias a través de la documentación y las clases online que pueden alcanzar alumnos en áreas remotas.
  • Cambios demográficos — Cuando los jóvenes se van de sus comunidades en busca de empleo y oportunidades, los ancianos no pueden transmitir su conocimiento y su lengua a las nuevas generaciones.
  • Políticas de la educación — Un apoyo sólido es necesario de parte de las organizaciones internacionales, las agencias gubernamentales y las ONG, para asegurarse de que las lenguas minoritarias se enseñen en las escuelas y se usen en lo cotidiano.

Trusted Translations normalmente trabaja para construir puentes lingüísticos entre varias lenguas preeminentes, como el español y el inglés, pero, sin embargo, también tiene en cuenta la importancia de las lenguas minoritarias. Los traductores profesionales tienen una sensibilidad especial para trabajar con públicos meta más pequeños, como las comunidades de hablantes de lenguas minoritarias.

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