El clásico ejemplo de la revisión final es el control de las imágenes con respecto al texto que aparece debajo.
Como muchos sustantivos en inglés no denotan el género, en español se utiliza el masculino o el femenino en la traducción según el criterio del editor, que algunas veces no puede ver las imágenes del documento original. Una vez que el texto está “unido” a las imágenes, es fundamental controlar que coincida el género del texto y que no se haya corrido el texto mismo de cada imagen, porque, por ejemplo, se copió mal el número de imagen, lo que producirá que la imagen no se relacione con el texto.
En esta etapa también sale a la luz cualquier problema que surja al armar automáticamente grandes proyectos, ya que cualquier alteración en el orden de un párrafo se hace evidente.
Es por ello que esta etapa resulta fundamental para los grandes proyectos, especialmente para manuales y guías para el usuario.
Versión en inglés: Examples of Final Revision