Nosotros los conocemos como Juan Pérez, fulano de tal, N.N., entre tantas otras. La verdad es que, a pesar de ser un nombre y el apellido de lo más común en Latinoamérica, no muchos conocemos a alguien que porte ese nombre a secas, pero solemos utilizarlo para referirse a una persona sin identidad determinada. En Estados Unidos se lo conoce como John Doe, tal como aquella serie que paso sin pena ni gloria por el cable. O a veces como John Smith, como el famoso explorador. Pero la verdad es que en todas partes del mundo hay un Juan Pérez, y tienen su particularidad.
El “fulano” viene del árabe “fulan”, que singifica “un tal”. Su equivalente femenino se pronuncia igual en español “fulanah”. Ya más lejos, en Italia se utiliza Mario Rossi y llegando a Asia, en Filipinas, antigua colonia española, se utiliza Juan de la Cruz.
El equivalente en Japón es Yamada Taro y Yamada Hanako en femenino, aunque en ocasiones prima “Nanashi-no-Gombei”, que sería algo así como “Sin nombre, Tal y tal”. Ya en China optaron por «Pinyin: Wúmíng Shì», que se traduce literalmente como «Sr./Sra. Sin Nombre”. Mientras que en India no fueron tan creativos y optaron por naamalum («desconocido»).
Los holandeses optaron por la rima y su John Doe es conocido como Jan Jansen, los bosnios no se quedaron atrás y sus tres opciones son dignas de un buen rap: Marko Marković, Petar Petrović y Sima Simić. Lo mismo con el búlgaro Ivan Ivanov.
Ya dejando de lado las rimas, los franceses utilizan Jean Dupont aunque también recurren al humor con Monsieur Tout-le-monde, algo así como “Sr. Todo-el mundo”. Aunque no tan gracioso es ser el encargado de una morgue en Finlandia, donde optaron por no economizar tinta y utilizan Matti Meikäläinen, aunque los alemanes los sufren más: Otto Normalverbraucher.
Para finalizar, y volviendo al español, la particularidad en este asunto, y para beneficio de todos aquellos que se apellidan Pérez, es que ni siquiera se encuentra al tope de la lista de los apellidos más comunes en los países de habla hispana, encabezados por Gómez, Rodríguez y González. Mientras que Juan es el nombre más común únicamente en Argentina (Juan Carlos, en realidad).