Cuando un texto en un determinado idioma se traduce a otro, en la mayoría de los casos la cantidad de palabras y por ende el espacio que el texto ocupa en un documento suele cambiar. Esto se debe a que cada idioma tiene su propia complejidad gramática y lingüística para lo cual se necesitan más o menos palabras para explicar la misma idea que en el texto en el idioma original. Cuando el texto traducido contiene menos palabras, se le llama contracción de texto. En cambio, cuando la traducción resulta tener un mayor número de palabras hablamos entonces de una expansión de texto.
Un caso típico de contracción y expansión son las traducciones de inglés a español. El inglés es un idioma de gramática simple que al traducirse al español siempre se expanden los textos, ya que este último idioma es más complejo y con estructuras más específicas y palabras que también suelen ser más largas. Si la traducción fuese del español al inglés, el texto definitivamente se contraería.
Otro ejemplo particular es con el alemán, donde acostumbran a juntar palabras para formar una sola. “Stadtverkehrsverbindungen” es una palabra que en realidad son varias juntas: las conexiones del tráfico de la ciudad. Y están los idiomas que usan símbolos, como el chino el japonés. Un solo caracter representa una palabra o un concepto, y cuando se traduce no hay que sorprenderse si el texto traducido resulta tener bastantes más palabras de lo que parecía en el idioma original.
Este es un factor que hay que tener en cuenta sobra todo en documentos que tienen un diseño donde el espacio para el texto es ajustado. En el caso de una contracción del texto pueden quedar espacios vacíos que pueden distorsionar un poco el equilibrio de un diseño, mientras que cuando un texto se expande puede sobrepasar los campos destinados al texto y obligar al diseñador encargado del paso de DTP a reformular el orden del documento. En ambos casos se pueden ajustar los textos aumentando o disminuyendo el tamaño de la tipografía, o cambiando un poco el orden de los elementos del documento. Solo hay que tener un poco de flexibilidad y considerar que el archivo traducido puede llegar a verse un poco diferente al original en términos de diseño y formato.
Ante cualquier duda o consulta sobre este tema, comuníquese con el equipo de Trusted Translations para que podamos asesorarlo y proponerle la opción que más se ajuste a sus necesidades.